 Asegura que ha agilizado los trámites pero continúa sin dar fechas para que las máquinas vuelvan a funcionar en la zona
El Ministerio de Fomento continúa sin ofrecer una fecha para el reinicio de las obras de mejora de la seguridad vial de la autovía A-55. Ayer emitió un comunicado en el que reconoce que está agilizando los trámites legales necesarios para continuar con el proyecto, pero omitió decir cuándo lo hará, un anuncio que los vecinos de Mos llevan meses esperando.Pero ya se han dado algunos pasos desde que hace una semana la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, alzara su voz para protestar por el retraso que acumulan estas obras. Técnicos de los servicios centrales de Fomento inspeccionaron la doble calzada el jueves de la semana pasada. «El ministerio realizará a la mayor brevedad posible los trámites administrativos restantes que permitan la continuidad de los trabajos y retomar las obras», señalaron ayer en un escrito. La administración titular de la carretera justifica el retraso en una serie de ajustes que han tenido que realizar en el proyecto por la aparición de nuevos servicios afectados y para evitar nuevas afecciones a bienes y derechos.
Las obras prácticamente no han experimentado ningún avance desde que comenzaron hace más de dos años. Todo el proceso de las obras ha sido lento desde sus inicios, a excepción de la inauguración oficial.
El delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, y el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pumar, descubrieron un mojón conmemorativo un día antes de que comenzara la campaña electoral de las elecciones generales de 2015. Un mes después de aquel acto continuaba sin observarse ningún movimiento de maquinaria en la zona. Fomento insistía en que las obras estaban en marcha, aunque durante aquella fase inicial las máquinas no fuera visibles. Tres meses después de la inauguración, el proyecto todavía seguía en la fase de estudios previos, dado que el único movimiento que lo único que se observaba en la zona era a los topógrafos realizando mediciones. La maquinaria estuvo unos meses trabajando en los accesos, pero desapareció de la noche a la mañana, hasta el día de hoy. Pese a todo, el Ministerio de Fomento siempre ha insistido que las obras nunca han estado paradas y continúa manteniendo que concluirán en septiembre de este año. El proyecto tiene el objetivo de mejorar la seguridad vial en los accesos, que en algunos puntos son de muy poco recorrido y escasa visibilidad, lo que es fuente de colisiones en las incorporaciones. Las obras cuentan con un presupuesto de 6,5 millones de euros.
Mos vuelve a salir a la calle esta tarde para demandar una solución rápida.
Mos volverá a movilizarse esta tarde para exigir a la dirección nacional de Carreteras que se reanuden las obras en la A-55. El gobierno municipal ha convocado una manifestación a las ocho de la tarde que partirá desde la zona de A Curuxeira, en Tameiga, hasta llegar al acceso de San Eleuterio, una de las zonas más afectadas por la paralización de las obras. Los miembros de la corporación municipal encabezarán esta marcha y convocan a todos los vecinos y asociaciones, así como a todos los usuarios de la autovía y todo tipo de entidades afectadas. Es la segunda movilización que llevan a cabo. La semana pasada organizaron una concentración frente a la Casa Consistorial que reunió a cientos de personas. Días después, la alcaldesa continuaba sin recibir una respuesta clara por parte de las autoridades competentes, por lo que anunció que continuarían con las movilizaciones. |
