Piden la tasa de cuatro ejercicios
Empresarios de Porriño han iniciado el procedimiento de reclamación de las cantidades que el Ayuntamiento cobró de más en la tasa de la basura, en base a la ordenanza aprobada por el pleno en 2010. La reclamación se inicia después de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) anulase la tasa por falta de motivación, tras la denuncia de un solo empresario.
Los industriales, que habían criticado en su día un aumento desmesurado e injustificado de sus recibos, ahora reclaman lo indebidamente cobrado desde 2011 hasta 2014, que en algunos casos puede alcanzar los casi 9.000 euros.
El abogado José Luis Rubianes Ferro es quien está preparando ahora los recursos que se entregarán por vía administrativa, y de no prosperar lo llevarán al contencioso administrativo. Rubianes explica que la justicia "anuló el artículo 6 de la ordenanza aprobada por el pleno de Porriño el 11 de octubre de 2010, y su anexo, ante la ausencia de motivación, habiendo un desigual reparto del coste del servicio entre los usuarios domésticos y las empresas, no explicando por qué no se tratan por igual". En este sentido el letrado subraya que "la falta de motivación es una nulidad de pleno derecho" y que en el fundamento cuarto de la sentencia hace referencia a la existencia de "arbitrariedad y desviación de poder".
Después de que se aprobara la norma, los empresarios instaron al Concello a su modificación y como nunca se llegó a ejecutar, decidieron acudir a la justicia, "pues consideramos que fue un aumento abusivo e injustificado", señala David Sobral, gerente de la Asociación de Empresarios de As Gándaras y de la Entidad Urbanística de Conservación A Granxa. Con la sentencia del TSJG, en 2015 los recibos de los empresarios volvían a marcar un importe similar al de 2010, con el correspondiente incremento del IPC.
Sobral pone como ejemplo de la subida desmesurada, "empresas que pagaban 270 euros pasaron a reembolsar 2.500 euros, lo que supone un aumento de más del 800%". El artículo 6 anulado establecía una tasa máxima de 2.500 euros, mientras que hasta el momento el tope se situaba en los 270 euros, por tanto "durante esos cuatro ejercicios el Concello ha realizado un cobro indebido que ahora reclamamos sea devuelto".
A finales del pasado año el pleno del Concello de Porriño modificó la ordenanza fiscal y reguladora de residuos sólidos urbanos marcando unas nuevas tasas a aplicar a las actividades económicas, en base, igualmente, a los metros cuadrados. En esta ocasión se fijó el tope en 900 euros, "una subida que consideramos razonable", califica Sobral. A pesar de que dista mucho de los 270 euros hasta ahora pagados, lo hace mucho más de los 2.500 euros que se establecieran en 2010. El acuerdo fue aprobado en pleno y publicado a principios de 2016 en el Boletín Oficial de la Provincia, no obstante, los empresarios aún no recibieron el recibo correspondiente a este ejercicio para comprobar el importe exacto en cada caso. |