En la asamblea anual de A Granxa mostraron su decepción por la actitud del Concello
El gerente de la Entidad Urbanística de Conservación de A Granxa, David Sobral, achaca el creciente descontento del empresariado hacia el Concello 'por no cumplir lo que prometió'. Y es que, transcurridos ya seis meses desde que se les aseguró que se iba a revisar la última subida de tasas 'estamos en mayo, van a pasar al cobro los recibos y no se ha hecho nada' , explicaba ayer a este diario Sobral.
La inquietud aumenta y así quedó patente en la asamblea anual de la Entidad celebrada la pasada semana 'con altísima participación', y en la que se abordó -como tema principal- 'la indignación creciente que hay en el tejido productivo del polígono por este tema y por el incumplimiento del Concello de Porriño a la hora de rectificar la Ordenanza de la tasa de basuras que aprobó en 2010'. Un tema sin resolver pese a que a finales de 2011 el ayuntamiento anunció que trataría de consensuar 'una subida más lógica y razonada'.
Las pymes 'están asfixiadas' ante tanto impuesto y elevan sus quejas ante la subida de 'hasta un 800 por cien' de la tasa de basura, más otro incremento de 'hasta un 25 por ciento' en el IAE y el suma y sigue de la nueva tasa de vados 'que se les cobra a todos por imposición, lo tengan o no'. Las pequeñas y medianas empresas piden al Concello 'que revise el tema con toda urgencia', y así se lo trasmitieron al concejal Marcelino Coto, presente en la asamblea. Y es que, en una coyuntura económica como la actual, 'las empresas se retraen y no generan empleo', manifiesta Sobral.
Desde finales de 2011, tal y como se explicó en la asamblea, las empresas de Porriño por la recogida de resíduos y en función del tamaño de la parcela que ocupen, pagan recibos de hasta 2.500 euros anuales. Cuando ese impuesto no superaba los 240 euros al año y teniendo en cuenta que muchas de ellas gestionan sus propios resíduos asimilables a urbanos y no utilizan el servicio de recogida municipal. Esto, pone de manifiesto que los criterios que ahora se siguen 'son erróneos' y que el tamaño de la parcela no está relacionado con la cantidad de resíduos que genera. El alcalde, 'reconoció su error' pero incumple su compromiso, y los empresarios ven con preocupación que 'el gobierno local siga manteniendo una subida desproporcionada, temeraria y abusiva y no rectifique'
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