La multinacional Grant Products, con fuerte implantación industrial en México, se hace con la firma gallega con el objetivo de reforzar su posición en el segmento premium
Los movimientos corporativos no cejan en la industria gallega de la automoción. En menos de un año, media docena de proveedores y auxiliares han cambiado de manos. La última, la empresa porriñesa W.R. Freiría, especializada en la fabricación de volantes y piezas de interior y exterior de madera para varias marcas automovilísticas y proveedores de primer nivel, en la que ha entrado el grupo norteamericano Grant Products. Esta multinacional, con sede en Duarte (California), tiene en México (en Matamoros) su mayor centro de producción y es líder en la producción de volantes de todo tipo de materiales para turismos, camiones y barcos. Con esta operación, la empresa estrena su división europea (Grant Products de España) y refuerza su posición en el segmento premium de volantes. W.R. Freiría tiene una gran experiencia en la fabricación de volantes y otras piezas de madera para vehículos de alta gama. Esta empresa nació en 1970 en el sector de la construcción, especializándose en elementos de madera, principalmente en suelos de parqué. Dieciocho años después, en 1998, se instala en el polígono de A Granxa, en Porriño, donde empezó a fabricar volantes de madera para Dalphimetal (hoy, TRW Automotive) y otros elementos para el interior y el exterior de los automóviles. La empresa gallega tiene instalaciones en Valencia, y en 2006 se lanzó al mercado internacional con una planta en México, en el estado de Chihuahua, en la que invirtió 7 millones de euros. En las instalaciones de Porriño, W.R. Freiría dispone de un centro de 850 metros cuadrados dedicado en exclusiva al desarrollo de proyectos y aplicaciones de I+D+i. Entre sus clientes estaban el grupo PSA Peugeot Citroën, General Motors y Ford. La entrada del grupo Grant Products supondrá un nuevo impulso para la factoría de Porriño, que ocupa a 34 trabajadores. La mayor planta de Grant Products está en Matamoros, aunque también tiene socios en Italia y Asia. Otra firma del automóvil que cambió de dueños en el último año fue Unitexga, a manos del grupo francés Michel Thierry. La planta redondelana, especializada en el corte y confección de cabezales y asientos para la industria del automóvil, se encontraba en "quiebra técnica" después de perder una serie de contratos. La entrada de Michel Thierry (que a su vez fue adquirido por la multinacional alemana Johnson Controls) ha permitido continuar con la actividad. También cambió de manos Incalplas, en Allariz, proveedor directo de Faurecia en Ourense. Esta firma, constituida en 1993, llegó a ser un socio estratégico de PSA. No obstante, a raíz de un incendio en 2006, la actividad en la compañía vino a menos, cobrándose la mitad de los empleos. Faurecia cerró la operación hace unos seis meses. La multinacional francesa Plastic Omnium hizo lo mismo con la planta de Peguform en Redondela. Esta empresa, que fabrica parachoques para el centro de PSA-Vigo, arrastraba dificultades financieras por causas ajenas a su actividad. En este sentido, la entrada de Plastic Omnium ha permitido normalizar su situación y recibir ya un nuevo pedido para PSA-Vigo. Pero la compraventa más importante registrada en el último año fue la de las plantas de Dytech Ensa en Zamáns, Valença y Faridabad (India), por parte del grupo americano BorgWarner. La operación ha permitido consolidar aún más el liderazgo de Ensa, que ha pasado a llamarse BorgWarner Emissions Systems. La multinacional incluso ha fijado en Vigo su división de emisiones y anunció su intención de ampliar instalaciones y crear 200 puestos de empleo. |