El centro de alta electrónica para coches inteligentes del CTAG arrancará en el 2008 con 120 ingenieros
Ya hay dinero para la construcción del Centro de Excelencia en Electrónica para Vehículos Inteligentes que, según los expertos, convertirá el área de Vigo en el epicentro nacional, y probablemente también europeo, de todos los avances tecnológicos que se produzcan en el campo de la seguridad activa y pasiva de vehículos.
Hacían falta 23,5 millones de euros para poner en marcha un proyecto que ya llevaba meses a la espera de fondos en los despachos del Ministerio de Educación y Ciencia. El pasado jueves, el director xeral de I+D, Salustiano Mato, se fue a Madrid a preguntar cómo estaba el tema y se vino con un crédito de 20 millones de euros bajo el brazo para poner en marcha el nuevo centro que, según declaró la ministra, Mercedes Cabrera, «será la base de operaciones de todo lo que se refiere a la innovación en el sector, junto con el CTAG (Centro Tecnológico de la Automoción de Galicia)».
Interés 0
Se trata de un préstamo a interés cero, que tendrá que ser devuelto. Así que a la dirección xeral de I+D no le ha quedado otra que asumir el pago con cargo a los presupuestos de Xunta; con lo que la aportación económica del Gobierno al proyecto no parece merecedora del calificativo de generosa.
Lo que está claro es que el centro va adelante. El calendario de ejecución de las obras arranca a principios del 2007, en una parcela contigua a la que ocupa el CTAG, en el polígono de A Granxa en Porriño, en una superficie que, sumando ambos centros, tendrá 25.000 metros cuadrados (estructurados en terrenos y edificios para albergar las instalaciones, zonas de boxes, taller de montaje de vehículos prototipo).
El equipo humano previsto en el proyecto inicial estará integrado por 120 ingenieros.
Su actividad abarca todos los ámbitos de la innovación electrónica en materia de componentes de seguridad para vehículos, un campo en permanente evolución y en el que todas las marcas de fabricantes están exigiendo constantes mejoras para dar respuesta a las demandas de protección y seguridad de los conductores.
Desde el punto de vista operativo, el centro de alta electrónica para vehículos inteligentes dependerá de la Fundación CTAG, institución privada, sin ánimo de lucro, declarada de interés gallego e industrial y presidida por Javier Riera, que también es director general de PSA Peugeot-Citroën.
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